El secreto de Helena (Lucinda Riley)



TÍTULO: El secreto de Helena
AUTOR: Lucinda Riley
EDITORIAL: Plaza & Janés

Sinopsis Editorial:

Dicen que los que se alojan en Pandora se enamoran.

Hace veinticuatro años, durante unas vacaciones mágicas en Chipre, Helena se enamoró por primera vez. Ahora regresa a Pandora, una casa hermosa pero en muy mal estado que su padrino le ha dejado en herencia, para pasar el verano junto a su familia. No obstante, la idílica belleza de Pandora esconde muchos secretos, secretos que durante años Helena ha sido capaz de ocultar a su marido, William, y a su hijo Alex, que, con solo trece años, se debate entre proteger a su madre o averiguar la verdad sobre su verdadero padre. 

El delicado equilibrio de la vida de la protagonista se rompe cuando coincide por casualidad con su antiguo amor y su pasado y su presente chocan por fin. Helena sabe que su vida y la de su familia no será la misma en el momento en que los secretos de Pandora salgan a la luz.


Me encanta Lucinda Riley y estoy disfrutando mucho de cada una de las novelas que componen la serie "Siete Hermanas" de la que aún faltan dos volúmenes. Aunque no están reseñadas en el blog, os las recomiendo mucho, pero también me han encantado los libros autoconclusivos que hasta ahora he podido leer de la misma autora "La joven del acantilado", "La rosa de medianoche" y esta novela que acaba de publicar Plaza & Janés. He pasado unos días la mar de agradables en compañía de Helena y su familia y sus amigos, y sus vecinos y... tanta gente que iba llegando a Pandora que por un momento he llegado a pensar que si aparecía alguien más, aquello iba a parecer el camarote de los hermanos Marx.

La novela, arranca realmente en la actualidad (2016) con la llegada a Pandona de Alex, el hijo de Helena. Llega a Chipre con una misión  muy concreta y en cuanto atraviesa las puertas de la casa, los recuerdos de aquel verano de hace diez años vuelven a su cabeza. En la casa encontrará el diario que fue escribiendo durante aquellos días y en cuanto lo abre y se pone a leer, compartirá con el lector su visión de todo lo que ocurrió allí durante Julio y Agosto del 2006 cuando llegó por primera vez a Pandora con su madre, Helena, y su hermana Immy y ya no regresaremos a la actualidad hasta la última parte del libro, donde descubriremos por qué está Alex en Chipre.

Una vez que comienza el diario de Alex, nos trasladamos a 2006. Su madre Helena, ha heredado de su padrino una preciosa casa en Chipre, una casa a la que no ha vuelto desde hace 24 años, pero de la que tiene muy buenos recuerdos, aunque no sólo de Pandora. En Chipre Helena se enamoró por primera vez a la edad de 16 años y nunca regresó. Está deseando volver allí y que su familia conozca los lugares en los que tan feliz fue, pero por otro lado tiene miedo de que algunos de los secretos que lleva guardando tanto tiempo acaben saliendo a la luz y de encontrarse frente a su primer amor. ¿Seguirá en Chipre? ¿Cómo habrá sido su vida desde que se vieron por última vez?

Lucinda Riley
Helena, por su parte, ha conseguido crear una familia preciosa. Está felizmente casada con Willian, un hombre encantador al que conoció en Viena cuando su hijo Alex ya tenía tres años y con quien ha tenido otros dos hijos (Inmy y Fred). Para William, Alex es tan hijo suyo como los dos más pequeños, pero Alex no puede evitar sentir curiosidad por saber quién será realmente su verdadero padre, aunque eso es algo que Helena ha guardado en secreto siempre, ni siquiera William o su mejor amiga Sadie lo saben. Cuando llegan a Pandora con intención de adecentar la casa ante la inminente llegada del resto de invitados, la primera duda de Helena queda resuelta. Sí, Alexis, aquel chico del que se enamoró hace tanto tiempo sigue allí. Ahora es un hombre viudo, con dos hijos ya mayores y sigue siendo tan interesante como siempre. 

Lo cierto es que además de ser un hombre encantador, Alexis se ofrece a ayudar a Helena en todo lo que necesite para que la casa tenga buen aspecto ante la llegada de William y Fred (el hijo más pequeño), Jules y Sacha (el mejor amigo de William) y sus dos hijos Rupes y Viola, la mejor amiga de Helena, Sadie y un fichaje de última hora, Chloë, la hija que tuvo William en su primer matrimonio. Para Alex, sin embargo, Alexis es como un moscón que ronda a su madre y se convierte poco menos que en su guardaespaldas a la espera de que llegue William y empieza a preguntarse por qué su nombre se parece tanto al del "moscón".

Poco a poco Pandora se va llenando de gente que le da vida a una casa que llevaba mucho tiempo vacía. Eso sí todos llegan con su cargamento de problemas. Sadie acaba de romper con su última pareja. Jules llega sin su marido Sacha y parece que las cosas no les van muy bien, aunque sí lleva a sus hijos con ella, Viola, una niña adoptada encantadora y Rupes al que Alex no soporta. Cuando llega William y se entera de lo colaborador que ha sido Alexis, digamos que tampoco le hace gracia y finalmente llega Chlöe, una preciosidad de quince años, a la que su padre hace mucho tiempo que no puede ver por culpa de su ex y que enamora al instante tanto a Rupes como a Alex.

A medida que el verano avanza en Chipre iremos descubriendo todos esos secretos que Helena guardaba. Veremos cómo reaccionarán los demás al conocerlos, y las consecuencias de tanto silencio.

"El secreto de Helena" ha sido una novela que me ha gustado muchísimo. El entorno en el que transcurre la historia es muy visual y si no te lo puedes imaginar (cosa practicamente imposible) solo tienes que buscar los rincones chipriotas en Internet. Ha sido una delicia sentirme uno más en esa casa abarrotada de gente, (y eso que yo soy mucho de estar sola), sentarme al borde de su piscina como una más y escuchar sus conversaciones.

Creo además que está lleno de personajes muy humanos, llenos de virtudes y defectos, que sufren cuando son heridos, pero con capacidad para recapacitar y tomar las decisiones adecuadas. Pandora parece cambiar a las personas y durante ese verano de 2006 todos lo podrán comprobar. Sin duda mis dos personajes favoritos han sido Helena y Alex. Ella es una mujer encantadora, feliz con su familia, pero también triste por las decisiones que tuvo que tomar en el pasado y de las que nunca ha dejado de arrepentirse.

En cuanto a Alex, creo que ha sido todo un acierto la forma en que la autora ha decidido narrar esta novela, contarnos el pasado alternando los capítulos narrados en tercera persona por un narrador omnisciente con los capítulos escritos por Alex en primera persona a través de su diario. Creo que le aporta la frescura de los trece años que tiene,  y aunque es un chaval superdotado en el fondo sigue siendo un niño y como tal reacciona en muchas ocasiones. Su diario es de lo más divertido, mordaz, socarrón y a la vez inocente y confieso que me ha hecho reír y sonreír en muchos momentos.
Las madres no se "cansan". Ese no es su cometido. Ellas tiran y tiran hasta que caen desplomadas en la cama en el momento adecuado. Por ejemplo, después de fregar los platos. [...] que mi madre se haya ido a "descansar" no significa que esté cansada. Significa cualquier cosa, desde demasiados gin-tonics a un cáncer terminal.
No es que sea una novela con grandes sorpresas, algunas cosas se adivinan, otras que parecen obvias no lo son tanto y otras sí han resultado ser, efectivamente, una sorpresa. Es una historia de secretos, amistades, risas y lágrimas, amor y desamor, en fin... de relaciones humanas. En conjunto me parece una novela de lo más recomendable, sobre todo si eres seguidora de esta autora y si no lo eres no es un mal libro para comenzar a leerla.

Como siempre os dejo el enlace para leer las primeras páginas de esta novela AQUÍ

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