(Leído en Septiembre 2009) Nº 67
Comentario, Crítica, Opinión
Esta novela es la tercera de la serie protagonizada por el comisario Roy Grace, pero ... ¡¡¡yo no me he enterado hasta que empecé a leerlo!!!
Comentario, Crítica, Opinión
Esta novela es la tercera de la serie protagonizada por el comisario Roy Grace, pero ... ¡¡¡yo no me he enterado hasta que empecé a leerlo!!!
De hecho no tenía ni idea de que hubiera una serie. Había leído “Una muerte sencilla” en el 2007, pero no pensé que éste fuera el comienzo de una serie (al menos en la edición que yo tengo no ponía nada) y mira tú que SI.
El primer libro debo reconocer que me gustó un montón. Muy entretenido. La historia comenzaba con una “típica bromita” que unos amigos le gastan a otro en su despedida de soltero (enterrarlo vivo). El problema surge cuando estos amigos se mueren en un accidente de tráfico después de haber enterrado al novio. Y NO CUENTO MAS.
Así que cuando salió en Círculo “Casi muerto” lo compré y cuando me puse a leerlo, el comisario Grace me sonaba, pero había cosas que no me cuadraban y es que me imagino que estarán contadas en el segundo libro QUE NO TENGO. Bueno, que no tengo aún, pero que ya está encargado.
De todos modos me lo leí porque los casos son independientes, aunque la historia de Grace es mejor leerla en orden claro.
El libro es entretenido, bastante mas gordito que el primero, pero para mi gusto algo más flojillo. La trama pintaba bien:
"Una mujer (Katie Bishop) de clase acomodada ha sido asesinada en Brighton y su marido (Brian Bishop) no parece ser capaz de recordar mucho, como por ejemplo tener una amante (Sophie Harrington) a quien supuestamente visitó mientras su esposa fallecía y quien, por tanto, podría servirle de coartada.
Pero Brian no recuerda muchas cosas. Ni tener un romance extramarital ni haber matado a esa misma amante, convirtiéndola en la segunda víctima de un asesino en serie que parece tener demasiadas cosas en común con Brian Bishop. Tanto en común que toda la novela gira en torno a una única idea: ‘El 71 por ciento de las víctimas de homicidio fueron asesinadas por alguien a quien conocían’, porque aparentemente es una linda cuidad costera, pero cuenta con un inframundo criminal a la altura de Loa Ángeles o Londres.
Ese asesino en serie se hace llamar a sí mismo ‘El Millonario de Tiempo’, dada la extraordinaria capacidad que tiene para invertir cuantas horas sean necesarias como para conocer en profundidad los hábitos de sus nuevas víctimas. Además, ese homicida tiene su propia firma: pone una máscara antigás de la II Guerra Mundial en el rostro de las mujeres a quienes mata. Eso sin olvidar otras formas de actuar que tal vez acaben por delatarlo: ‘En los bolsillos con cremallera de la chaqueta, además de la cartera y el móvil, llevaba un rollo de cinta adhesiva plateada, un cuchillo, cloroformo y un frasco de Rohypnol, la droga fulminante llamada también de la violación. Y otras cosas –nunca se sabía cuándo iba a necesitarlas…".
En cuanto te metes en materia y llegas a la página 83 piensas “no puede ser que faltándome 510 hojas esté acertando cómo va a terminar esta historia” y oye pues casi casi, sólo me faltó un detalle para dar en el clavo. Y es que los finales no son lo fuerte de Peter James (o es que yo soy muy buena ¡vete a saber!), pero aún así las tramas de los libros a mí me parecen muy entretenidas. Además también el misterio envuelve la vida del comisario, ya que su mujer desapareció ocho años atrás y su cuerpo nunca fue encontrado, con lo que siempre planea sobre la cabeza de Grace la duda y el dolor de no saber, a pesar de que parece que su vida vuelve a encauzarse en este sentido.
Lo dicho la novela me ha gustado, es ágil, engancha, los personajes principales y secundarios son muy interesantes y están bien logrados y por supuesto tenemos las escenas en el depósito de cadáveres que entre tanta novela negra y CSI estamos tan acostumbrados a ver.
Hola Bookworm.
ResponderEliminarTal y como te dije en mi blog, aquí estoy para hacerte una visitita :-)
El libro que comentas parece interesante. Al menos, el quid de la cuestión (que le dejen a uno enterrado vivo) presenta una trama que llama mucho la atención. El problema que comentas sobre el final pasa bastantes veces: lees un libro que te apasiona desde la primera página... y cuando llegas al final te defrauda un poco. Es que, conseguir un buen final es difícil, no creas.
Pues si te gustan los misterios..., mañana publico un cuentecito (de mil palabras) de misterio ;-). Se me ocurrió mientras escribía los articulitos de Agatha Christie para Palabras y Mundos. Yo creo que estaba obsersionada con tanto crimen :-).
Gracias por tu visita a mi blog y seguro que me verás por aquí con frecuencia, porque me ha gustado el tuyo.
Saludos.
S. Cid
Vaya a ti te ha pasado con este libro, lo que me paso a mi años ha con mi autora favorita,Patricia Cornwell, el hecho es que comence con el tercero de sus libros y aunque los casos son independientes, los personajes principales van evolucionando y hacen referencia a los otros libros, asi que como tu dices, lo lei porque pintaba bien, pero hasta que no lei los dos que le precedian se me quedaron cosas colgando. Voy a apuntarme estos titulos, me gusta la novela negra
ResponderEliminarS. Cid: Bienvenida a mi blog. Nos leeremos mutuamente en adelante. Luego me leo tu relato. Yo también llevo una temporada con novela negra y parece que aún no me he cansado.
ResponderEliminarCarmina: A ver qué te parecen los libros. A mi me están gustando, aunque los finales podrían ser mejores. De todas formas cumplen con aquello de entretener.
Besos a las dos.
Leí el primero "Una muerte sencilla", me gustó tanto la trama como el protagonista. Gracias a tu comentario en Anobi empecé por el primero.
ResponderEliminarSilvia: Me alegro que mis cometarios en Anobii te animaran a leer a este autor (¿somos vecinas? Es que tengo tantos vecinos que ya no sé). Yo por fin ya tengo el que me faltaba (el 2º) y no sólo ese, sino el cuarto que también estaba ya editado.
ResponderEliminarTengo que ponerme al día.
Un saludo guapa