AUTOR: Ramón Campos
Sinopsis Editorial:
Barcelona, finales del siglo xix. Un joven de diecisiete años trabaja en el taller de orfebrería de su padre. Instruido en el oficio desde niño, le espera un prometedor futuro en la talla de piedras preciosas. Pero su vida experimenta un vuelco cuando conoce a Isabel, la hija de un aristócrata venido a menos que anuncia que concederá la mano de su hija a quien le ofrezca el diamante más grande que jamás se haya visto.
De la agitada Barcelona a la bulliciosa Ámsterdam y su mercado de diamantes; de Holanda a Sudáfrica; de la refinada Ciudad del Cabo a las abrumadoras minas de Kimberley repletas de esclavos, pasando por el temible desierto de Karoo, el orfebre recorrerá un mundo fascinante, cautivador y cruel al mismo tiempo, junto al despiadado marqués de Terrassa y a la dulce esclava Etweda.
En su travesía, el orfebre descubrirá la valía de las enseñanzas de su padre y maestro, la importancia de ser leal al propio oficio y, sobre todo, que a veces hay que viajar al fin del mundo para darse cuenta de que lo que uno anhela está más cerca de lo que cree.
La casualidad quiso que tropezara con este libro en una tienda de segunda mano y me sorprendió bastante, porque la verdad es que es una novela relativamente reciente, y como la tenía en mi LIL (Lista Infinita de Libros) no dudé en comprarla. No sé si a la persona que se deshizo de la novela le gustó o no, pero yo se lo agradezco porque además de haberme salido más barata, he pasado unas horas de lo más entretenida. Curiosamente empecé a leerlo cuando me quedaba poco para terminar "Flor de sal" de Susana López Rubio y me encontré entre las páginas de este libro a un protagonista que se parecía mucho en su forma de ser a Julieta Carrión, así que enseguida tuve claro que iba a disfrutar tanto con la historia de este orfebre que también muy joven se ve envuelto en la mayor aventura que hubiera podido imaginar nunca, como con la de Julieta.
Cuando comienza la novela, nuestro protagonista y narrador es un joven orfebre que trabaja codo a codo con su padre "El Inglés" en un pequeño taller en la Barcelona de finales de XIX. "El inglés" le ha ido enseñando a su hijo todo lo que sabe del oficio y además a ser una buena persona, justa y honrada. Llevan una vida modesta y gran parte de lo que ganan en la orfebrería se va en médicos que no acaban de saber qué mal aqueja a su madre. Todo parecía indicar que el hijo ocuparía el lugar del padre en el taller hasta que un domingo en misa sus ojos se posan sobre Isabel, cuya posición social es muy superior a la de él y por eso ocupa los primeros bancos de la iglesia junto a su familia.
Desde ese momento el pobre muchacho vive soñando con Isabel, sabe que será rechazado por la familia de la joven porque nada tiene que ofrecer, sin embargo la mala situación económica del padre de Isabel hace que decida conceder la mano de su hija a aquel que le traiga el mayor diamante nunca visto. Por una serie de circunstancias y para evitar que su familia caiga en desgracia, nuestro joven orfebre acabará embarcándose en un viaje en busca de ese diamante para uno de los pretendientes de la joven, aunque en su mente será él quien se lo ofrezca. Tendrá 100 días en total para regresar a Barcelona con el diamante tallado.
Kimberley's Big Hole. Fotografía de Rovos.com |
A partir de aquí comienza la verdadera aventura para nuestro protagonista que por primera vez sale de Barcelona y empieza a conocer el mundo que le rodea. Para él supondrá todo un aprendizaje, nuevas gentes, nuevos paisajes, nuevos olores y sabores pero sobre todo nuevos países (viajará hasta Amsterdam y de allí a Ciudad del Cabo en el Sur de Africa, la ciudad con puerto más cercana a Kimberley, donde dicen se encuentran los diamantes más grandes). Deberá aprender a distinguir en quién confiar y en quien no, serán muchas las zancadillas que tendrá que sortear y deberá jugar bien sus cartas si quiere volver a ver a Isabel. Será un viaje difícil y peliagudo, pero su Isabel bien lo vale, o al menos eso quiere creer.
"El orfebre" por supuesto cuenta con un malvado de manual, y antagonista de nuestro protagonista, el marqués de Terrassa, un hombre sin escrúpulos, un negrero que se enorgullece de serlo y que no duda en eliminar de su camino todo aquello y a todo aquel que le impida conseguir lo que desea. También me encantaría destacar a un personaje que me ha parecido maravilloso y es la esclava Etweda, que fue separada de su familia para acabar siendo una posesión más del marqués.
Ramón Campos. Faro de Vigo |
A mí me ha gustado mucho y se me ha hecho corta. Eso sí, aunque aviso que todo queda bien resuelto, por el final de la novela, parece que podría haber ¿una continuación? La verdad es que no lo sé y aunque he dicho muchas veces que ya estoy cansada de bilogías, trilogías y demás -ías... me apunto al siguiente si lo hubiera.
«Mientras haya gema, hay joya —explicaba mirándome por encima de las lentes que colgaban sobre la punta de su nariz aguileña—. Solo hay que darle las suficientes vueltas a la piedra para conseguir encontrar la forma adecuada de tallarla»
Booktrailer de la novela
Para leer las primeras paginas os dejo el enlace AQUÍ
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