10 de Abril "Tag Literario"
10.- Una lectura obligatoria de la escuela o instituto que te gustase especialmente.
10.- Una lectura obligatoria de la escuela o instituto que te gustase especialmente.
La verdad es que no recuerdo que ninguno de los libros que teníamos que leer obligatoriamente durante mi época estudiantil no me gustase. Hasta iba a la librería a comprarlos con ilusión. En aquel momento, una no era económicamente independiente y como ya disfrutaba tanto leyendo, creo que me daba igual el libro que me mandaran leer y me encantaba ir con mi madre a comprar o encargar lo que pedían los profesores. Luego forraba los libros para que no se me estropearan (y claro así están hoy como están. Tremenda asesina es la cinta celo, al menos la de los 80) pero bueno, tengo los libros todavía conmigo que es lo que importa.
En el Reto Literario del año pasado, en un Tag similar a este, elegí "El Camino" de Miguel Delibes, que me había encantando, pero por no repetir y tampoco volver a mencionar a mi querido Don Quijote, hoy elijo otra novela que me gustó un montón: "La Regenta" de Leopoldo Alas "Clarín", leída en 3º de B.U.P. El personaje de Ana Ozores, es de los que todavía hoy recuerdo perfectamente.
Como siempre digo, gracias a esas "obligaciones" literarias que nos imponían nuestros profesores, algunos nos acercamos a clásicos que de otro modo seguramente no habríamos leído. Teniendo en cuenta lo mucho que disfruté con estos libros no sé por qué me cuesta tanto leer clásicos ahora. En fin, para todo hay un momento y yo desde luego tengo material "clásico" de sobra en casa para seguir leyendo. Espero que en algún momento de mi vida me apetezca hacerlo.
Precisamente quiero leer "La Regenta" este verano. Estoy segura de que será una lectura de las que permanecen en la memoria.
ResponderEliminarPor otra parte, a mí también me hacían ilusión las lecturas obligatorias. Me tocó leer "La plaza del Diamante", "Últimas tardes con Teresa", "Cien años de soledad" y algún otro clásico del siglo XX, todos espléndidos. Gracias a esas lecturas descubrí a autores a los que seguí leyendo después.
"Cien años de soledad" lo leí, pero sin ser "obligatorio" y me gustó mucho. Espero que "La Regenta" te guste. Seguro que nos lo contarás con detalle.
EliminarEl camino lo leí ya de adulta por recomendación de mi chico él sí que lo leyó en el instituto. A mí me gustó mucho El misterio de la cripta embrujada de Eduardo Mendoza todos los libros de esa época están en casa de mi madre. Besos.
ResponderEliminar"El misterio de la cripta embrujada" lo leyó mi hermana y después también lo hice yo, pero sin obligaciones y me gustó mucho, la verdad. Mendoza sabe cómo entretener y sacar muchas sonrisas. Fue una novela divertida.
EliminarMomo de Michael Ende... Fue lectura obligatoria en 1º de Bup y lo disfruté muchísimo. Tus lecturas las tuve como lectura obligatoria en carrera. El camino me encantó y La Regenta me tuvo enganchadísima.
ResponderEliminarBesotes!!!
A mí "Momo" me pareció aburridísimo. Es más, está en una lista de novelas que el instituto recomienda a los alumnos (si quieren subir nota) y aunque lo tengo en casa, conociendo a mi hijo, dudo mucho que le guste. Hasta lo comenté con su tutora y también me dijo que le pareció una novela aburrida. Ya ves, lo que son los gustos.
EliminarYo creo que el encanto de las lecturas obligatorias era compartir tu opinión con tus compañeros y (en mi caso) con el profesor de literatura. Su amor por la lectura y su forma de contagiarlo no lo he visto en ninguna otra persona en mis casi 29 años de vida. Disfrutaba enormemente con sus comentarios de texto y contextualización de las novelas. Muchas veces, en la actualidad, me acuerdo de él con cariño... y pienso en todos esos alumnos que han podido disfrutar de sus enseñanzas.
ResponderEliminarDar un con profesor de literatura que además de "obligarte" a leer algunos libros que ya tienen marcados, te recomienda lo que lee él o ella y lo hace con pasión es un lujo. Yo tuve una profesora así en 3º B.U.P. y siempre me acordaré de ella. Me encanta cuando nos contaba de que iban los libros que leía. Lo hacía como si los viviera.
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