Tren bala (Kotaro Isaka)

TÍTULO: Tren bala

AUTOR: Kotaro Isaka

EDITORIAL: Destino

Sinopsis Editorial: 

Nanao, conocido como «el asesino más desafortunado del gremio», sube a un tren bala de Tokio a Morioka con una sencilla tarea: robar una maleta y bajarse en la siguiente estación.

Sin que él lo sepa, el mortífero dúo de sicarios conocidos como Mandarina y Limón también busca la misma maleta, y ellos no son los únicos pasajeros peligrosos a bordo. Satoshi, «el Príncipe», un joven de apenas catorce años pero con la mente de un psicópata despiadado, se encontrará con Kimura, con quien tiene una cuenta que saldar.

Cuando los cinco asesinos descubren que viajan todos en el mismo tren, se dan cuenta de que sus misiones están más conectadas de lo que pensaban.

Cuando compré esta novela en la última Feria del Libro de Madrid no sabía que ya había una película a punto de estrenarse. Leí la sinopsis, me gustó y... ¡a la saca! Justo cuando me animé a leerla, vi que en la fajilla exterior ponía lo de "la nueva película de Brad Pit y Sandra Bullock" 🤦‍♀️y quiso la casualidad que empezara a leerla justo la semana que se estrenaba, así que le dije al Sr. Bookworm que se lo leyera también y cuando la terminamos nos fuimos a ver la película.

En esta ocasión debo decir que casi estoy a la par con la película y la novela. Me han gustado las dos, la verdad. La película se ha pasado por el forro la novela añadiéndole cosas y cambiando otras, por no hablar de ese final hollywoodiense total que le ha añadido, pero estaría mintiendo si no dijera que me lo pasé genial en el cine.

Ya al poco de comenzar el libro, le dije al Sr. Bookworm, que dos de los asesinos me recordaban a Vincent y Jules de Pulp Fiction, pero es que a medida que sigues leyendo la novela tiene ese aire Tarantinesco que a nosotros tanto nos gusta y que en el cine, aún se nota mas.

Nanao (Ladybug)

El protagonista principal sería Nanao (Brad Pit, "Mariquita" en la película), un asesino que podría ser la definición de la ley de Murphy en persona, si algo puede salir mal, a él le saldrá mal. 

De hecho se sube al tren bala con la única misión de coger una maleta y bajar en la siguiente estación, pero obviamente eso no ocurrirá y durante todo el trayecto del tren iremos conociendo a otros personajes (asesinos también) que sin saberlo tienen diferentes misiones relacionadas con la maleta de marras y otro personaje, aunque  este no viaja en el tren.

Limón (izq.) Mandarina (dcha)

Los que sí viajan el tren son Mandarina y Limón, "los gemelos", dos curiosos personajes que no pueden ser más dispares, el primero es un gran lector y el segundo resulta por momentos hasta infantil con su obsesión por "Thomas (la locomotora) y sus amigos". Este par, que extrañamente se complementan genial, suele dejar una sangrienta huella de su paso tras cumplir con sus "encargos".

También se ha subido al tren El Príncipe, uno de los personajes más fascinantes y perturbadores de la novela (la película ha hecho un significativo cambio con este personaje no solo físico sino también en lo que a profundidad respecta. En el libro tiene muchísimo más peso). Es un adolescente que pone los pelos de punta con su forma de pensar y sobre todo de actuar, pero de la que no os voy a concretar nada, lógicamente.

Al final, todos se irán entrecruzando, y poco a poco irán uniendo cabos, pero la acción, los malos entendidos, la casualidad y los encargos sangrientos harán que la novela sea de lo más entretenida, y aunque el tren no va especialmente lleno, los cadáveres empiezan a acumularse, eso sí, el resto de pasajeros no parece enterarse de nada. 

Kotaro Isaka
Fotografía de
Hoffmann und campe

Como el autor irá saltando a los diferentes puntos de vista de los personajes, a veces la acción se ralentiza un poquito, pero tampoco de forma que te saque de la lectura y además, a pesar de ser una novela de acción, de esta forma conocemos bastante bien a los personajes y ya os digo que vale la pena.

"Tren bala" es una novela de acción entretenida, caótica, divertida y disparatada por momentos, pero que también le sirve al autor para tocar temas como el alcoholismo, el suicidio, el bullying, étc... y sinceramente, cuando lo terminé me apetecía mucho ver la película, porque estaba segura de que podía ser uno de estos casos en los que la adaptación a la pantalla fuera incluso más interesante que el libro. No diría que haya sido así, pero me lo he pasado muy bien con ambos formatos.