Hace un par de días os dejaba la reseña de la novela que traigo hoy a esta sección. Ya sabéis (si la habéis leído) que me gustó mucho y por lo que se ve a muchos también os llamó la atención, así que aquí os traigo su comienzo.
Se trata de "LA OTRA MECANÓGRAFA" de Suzanne Rindell y así comienza...
Se trata de "LA OTRA MECANÓGRAFA" de Suzanne Rindell y así comienza...
"Dijeron que la máquina de escribir nos despojaría de toda feminidad.
Basta con echar una mirada al artilugio para comprender cómo han llegado a semejante conclusión los autoproclamados guardianes de la virtud y la moralidad femeninas. La típica máquina de escribir, ya sea Underwood, Royal, Remington o Corona, es un objeto adusto y severo cuyos ángulos rectos van directos al meollo sin ningún indicio de detalle curvilíneo o capricho femenino. A ello se suma la pura violencia de sus brazos de hierro, que aporrean la hoja de papel con despiadada fuerza. Despiadada, sí. Sentir compasión no es una de las funciones de la máquina de escribir.
Supongo que yo tampoco sé gran cosa sobre eso de sentir compasión, pues mi trabajo está relacionado con el otro aspecto del asunto. Me refiero a las confesiones. No soy yo quien las obtiene; eso le corresponde al sargento o al teniente de policía. No es mi función. Mi trabajo es silencioso...
Basta con echar una mirada al artilugio para comprender cómo han llegado a semejante conclusión los autoproclamados guardianes de la virtud y la moralidad femeninas. La típica máquina de escribir, ya sea Underwood, Royal, Remington o Corona, es un objeto adusto y severo cuyos ángulos rectos van directos al meollo sin ningún indicio de detalle curvilíneo o capricho femenino. A ello se suma la pura violencia de sus brazos de hierro, que aporrean la hoja de papel con despiadada fuerza. Despiadada, sí. Sentir compasión no es una de las funciones de la máquina de escribir.
Supongo que yo tampoco sé gran cosa sobre eso de sentir compasión, pues mi trabajo está relacionado con el otro aspecto del asunto. Me refiero a las confesiones. No soy yo quien las obtiene; eso le corresponde al sargento o al teniente de policía. No es mi función. Mi trabajo es silencioso...
Que ganas tengo de hacerme con este libro y de leerlo ;D Disfrutalo
ResponderEliminarTiene muy buena pinta :) Feliz finde!
ResponderEliminarMe gusta ese principio!
ResponderEliminarBesotes!!!
Tiene muy, muy buena pinta. Me paso a leer la reseña :D
ResponderEliminar¡Muchos besos!
Se me paso tu reseña pero el principio me encanta, un beso.
ResponderEliminarComo ya dije en la reseña tiene muy buena pinta,besotes
ResponderEliminarYo estoy deseando leerla. Me resulta muy atractiva.
ResponderEliminarMe suelo fiar de los comienzos, por eso siempre los pongo
ResponderEliminarMe gusta este, estaré pendiente
Besos
Me gusta el comienzo. Ay, cómo me tientas con este libro :P.
ResponderEliminarBesos.
Si ya me dejaste con las ganas tras tu reseña, con esto lo has rematado!:)
ResponderEliminar1beso!
Con cada entrada que leo sobre esta novela se acrecientan mis ganas (y ansias jejeje) de hacerme con ella.
ResponderEliminarSaludos