TITULO: Lágrimas de amor y guerra
AUTOR: Marian Rivas
PRECIO: 17€
FICHA DEL LIBRO: Aquí
SINOPSIS:
La vida de la joven Magda transcurre entre libros y conciertos de música clásica en los días previos al estallido de la II Guerra Mundial. Su breve pero intensa relación con Karl y la posterior desaparición de este, la llevará a infiltrarse en una complicada misión como espía en la residencia de un atractivo capitán nazi, con el objetivo de buscar la verdad y pasar información a la resistencia.
Cuarenta años después, la última carta escrita por Karl a su amada acabará en manos de Beatriz que se embarcará en una búsqueda en la que sus descubrimientos marcarán su vida y la de su prometido
para siempre.
Aventuras, situaciones al límite, secretos y antiguas venganzas conjugarán parte de los ingredientes que llenan esta historia en la que se aprenderá que los secretos del pasado marcan los designios del futuro..
A partir de este momento emprenderá una huida desesperada hacia Múnich en un viaje que marcará su vida para siempre adentrándose en las -hasta ahora desconocidas- actividades como espía de su madre en Alemania durante la segunda Guerra Mundial, donde tendrá que enfrentarse no sólo a aspectos inusitados sobre su progenitora sino a una persona de su pasado que pretende vengar una antigua deuda.
NOTA: Esta reseña ha sido actualizada con la nueva versión de este libro. Antes aparecía con el título "Esperando una respuesta" y su precio era de 34€. He decidido modificarla, para que pueda aparecer en las búsquedas que hagan de ella en la red los posibles lectores.
Hoy os traigo la reseña de la primera novela de Marian Rivas, una historia narrada en dos líneas temporales que a pesar de su grosor se lee con fluidez, aunque confieso haberme sentido mucho más atrapada por una de esas dos líneas temporales que por la otra. Aviso que no es una reseña precisamente breve.
Por un lado nos situaríamos en los años 80 y por otro en los 40, durante la Segunda Guerra Mundial. Esta forma de narrar en las novelas me suele gustar mucho porque normalmente cuando más interesante está un capítulo, de repente el autor te deja en vilo y salta a la otra época.
La verdad es que he disfrutado con la lectura en general pero me he sentido mucho más interesada por la historia que se desarrolla durante los años de la Segunda Guerra Mundial y ahora os cuento por qué.
Nos encontramos en Madrid donde Beatriz y su amiga Nuria son socias en un negocio de antigüedades en el que todo les va muy bien. Además Bea está prometida con Adam, un abogado con un futuro también muy prometedor. Pero todo lo que parecía tan perfecto se trunca en un mismo día.
Por un lado Bea descubre en un viejo escritorio que su madre le ha enviado para restaurar, una misteriosa carta firmada por un hombre llamado Karl y dirigida a alguien de nombre Magda que resultará ser precisamente su propia madre. Cuando le pregunta quién es Karl, su madre no duda en responder: "Karl es tu padre". ¿Su padre? ¿Entonces el hombre al que Beatriz ha considerado su padre toda la vida no lo es? Magda no quiere entrar en detalles, pero le pide que intente averiguar qué fue de él. Como única ayuda le entregará unos diarios que decidió escribir al terminar la guerra para dejar constancia de su historia.
Por otro lado la vida de Adam comenzará a parecerse más a una pesadilla, cuando aparece en escena Cristina, una mujer que conoció siendo un niño y que pagó sus estudios a cambio de algo que ahora pretende cobrar y que por supuesto él nunca ha mencionado delante de Beatriz. Ella se siente engañada y decide alejarse algún tiempo de Adam marchándose a Alemania para intentar averiguar qué fue de Karl. En Alemania contará con ¿la ayuda? de Miguel, un periodista amigo de la pareja (o al menos lo era) que le puede facilitar el camino gracias a algunos de sus contactos y que siempre ha estado enamorado de Bea, aunque ella acabara decantándose por Adam.
|
Karl fue enviado al frente para hacer fotografías y un día no se supo más de él ¿Por qué...? |
Bien, como os decía, la historia se narra en dos épocas, pero es que además la historia más actual se divide en dos hilos que en principio transcurren paralelos; por un lado en Alemania vemos cómo le va a Bea con su investigación sobre Karl y por otro vemos la vida de Adam en Madrid y su lidia con Cristina. Digo que en principio las historias transcurren paralelas porque creo que esa era la intención de la autora, pero los tiempos y fechas que encabezan las distintas partes de las dos historias de la actualidad a veces me han confundido más que ayudado a situarme.
Es difícil de explicar. A ver si lo consigo...
Un ejemplo: En la misma época (finales otoño 82) en Madrid, Adam va a una exposición de arte y en Alemania Bea va con Miguel al registro donde tienen una discusión. En el siguiente capítulo narrado en la actualidad nos encontramos con que ya estamos en (invierno 82) y mientras que en el capítulo referente a Adam han pasado unos meses desde la exposición, Bea va al periódico a hablar con Miguel para aclarar esa discusión. Esto es algo que me ha hecho volver hacia atrás en alguna ocasión, pero que en realidad no entorpece la lectura a la hora de seguir la historia, además no sé si ha sido sólo una sensación mía. Me gustaría mucho conocer la opinión de algunas blogueras que sé que ya tenéis la novela en relación a este punto cuando la vayáis leyendo.
Sobre la trama
Con respecto a la trama que se desarrolla en la época actual os diré que está narrada en tercera persona y que sobre todo irá contando los altibajos por los que va pasando la relación de Bea y Adam, sus dudas, sus miedos y recelos y sobre todo los esfuerzos de Miguel y Cristina para que esa relación no siga adelante. No os podría decir exactamente por qué esta parte no me ha enganchado tanto. Ha habido momentos en los que me parecía estar en medio de un juego de niños inmaduros que no acababan de afrontar sus sentimientos o quizás simplemente haya sido que la trama más antigua, que la autora nos presenta a modo de diario y por lo tanto narrada en primera persona por la madre de Beatriz, haya resultado ser mucho más emocionante. Descubriremos cómo por amor Madga arriesga su vida y se convierte en una espía entrando a trabajar de gobernanta en la casa de un capitán miembro del gobierno. Esta parte me ha gustado muchísimo más. No solo conoceremos en profundidad a este personaje, sino también a la familia alemana para la que trabaja.
Sobre los personajes:
Magda: Para mí ella es el alma de este libro, una mujer valiente, luchadora que me ha tenido en vilo en muchas ocasiones por las situaciones límite a las que la autora la lleva. También ha logrado emocionarme en el último episodio (creo que el más extenso) de su diario y que no pude dejar de leer hasta que Beatriz llegó a la última hoja del diario.
Beatriz: Para ella la situación es complicada, las dos personas que más quiere le han ocultado partes de su pasado que podrían sin duda afectar a su futuro. De repente su mundo se desmorona y se siente perdida. No me imagino a mi madre guardando un secreto de este calibre ¿Cómo reaccionaría? No me lo puedo ni plantear. En todo caso me ha gustado mucho que con la lectura del diario aprendiera a conocer más a fondo a su madre y sobre todo que al final pudiera darle una respuesta sobre Karl.
Adam: Creo que sí tiene claro sus sentimientos por Beatriz, pero me ha parecido un hombre débil, que en ocasiones excusa sus actos culpando a los demás y eso no me gusta en el carácter de nadie. Creo que él es el único responsable de lo que le pasa y por supuesto de lo que hace. Siempre es arriesgado guardar historias que sabes que acabarán saliendo a la luz, pero es el colmo que todavía consiga empeorarlo aún más. De verdad le hubiera dado dos bofetadas en más de una ocasión.
Miguel: ¡Uy este! Amigos así no quiero yo muchos. Celoso, caprichoso, aprovechado y no sigo porque me enervo. Intenta sacar partido de la estancia de Beatriz en Alemania y no es tan transparente como ella piensa.
Cristina: Es la típica malvada de novela. Evidentemente no ha conseguido caerme bien ni siquiera cuando su actitud cambia, para mí, por cierto, un cambio demasiado "repentino". Es astuta, egocéntrica y engreída e incapaz de ver el rechazo de Adam porque simplemente no lo puede asimilar.
¿Me ha gustado el libro? Sí, la verdad. Lo empecé en un momento en que se me complicaron un poquito las cosas en casa y apenas podía robar unos minutos al día para leer, y me daba bastante rabia no poder dedicarle más tiempo.
No diré que es una novela perfecta, porque en mi opinión creo que no lo es y además su autora me pidió que le dijera sinceramente qué es lo que me había gustado y lo que no y eso me propongo hacer.
Me da la sensación de que en la parte que transcurre durante los años 40, la autora se ha implicado más. Imagino que precisamente por tratarse de una época histórica de la que tanta información hay, se habrá documentado muchísimo más que para crear la historia actual, que podría darse en cualquier otro tipo de novela y que no me ha parecido tan interesante ni necesaria. Supongo que hacía falta una hija a la que revelar toda la historia, e incluso un Miguel que le ayudara en la investigación, pero lo de Adam y Cristina, no me ha llegado ni aportado demasiado.
Sin embargo con Magda sí ha sabido calarme. La autora ha conseguido transmitir a través de este personaje la angustia que sufría al vivir con el temor constante de ser descubierta, el dolor de no saber nada del hombre al que ama, el miedo de vivir bajo el techo de un nazi odiando lo que él representa y a la vez adorando a la hija de éste y apreciando también a su esposa.
Creo también que con un buen corrector de estilo la novela habría ganado mucho. He encontrado algunas erratas, alguna falta de ortografía, alguna expresión que me ha chocado porque nunca la he oído y por lo tanto en este caso puede ser un problema mío porque no sé si se suele utilizar como "indagando en la herida" (siempre he oído "hurgar en la herida"), pero que desde luego no impiden para nada seguir la lectura.
Para finalizar, creo que a pesar de su grosor la lectura resulta muy amena y ágil. Además está escrita de un modo sencillo y directo. Podrá resultar más o menos interesante según la línea temporal en que uno esté sumergido, pero en ningún momento se hace pesada. Vale la pena adentrarse en esta historia de espionaje por amor y supongo que a los más románticos también les gustará saber cómo se resuelve la historia entre Bea y Adam. Guerras, espías, amores, intriga y misterio son ingredientes suficientes para atrapar al lector durante unos días entre las páginas de este libro.
Fotografías utilizadas: