El club de los pirómanos (Brock Clarke)

(Leído en Agosto 2009) Nº 59
Comentario, Crítica, Opinión


ARGUMENTO:

Lo último que imaginaba el adolescente Sam, cuando fascinado por las historias de su madre se introduce en la casa de Emily Dickinson, es que terminaría provocando un incendio que acabaría no solo con el venerado museo, sino también con la vida de un incauto matrimonio de profesores que aprovechaban unas horas de soledad para dar rienda suelta a su pasión en la vieja cama de la escritora. Tras pasar diez años en una cárcel de baja seguridad entre tiburones de Wall Street, Sam decide rehacer su vida. Rechazado por su entorno, ingresa en la Universidad donde se decanta por la fascinante carrera en Ciencias del Envasado, tras desestimar por absurdos los estudios de Filología inglesa. Allí se enamora, se casa y tiene dos niños adorables. Su vida transcurre en la sencilla felicidad doméstica de una urbanización en "donde el silencio era tal que nadie se atrevía a cortarse las uñas en el porche por si el ruido molestaba a algún vecino". Pero repentinamente el pasado llama a su puerta y cuando las casas de Robert Frost, Edith Wharton, Mark Twain y Nathaniel Hawthorne empiezan a arder, Sam se convierte en el principal sospechoso.

Con este título tan pretencioso y un argumento tan prometedor arranca esta novela que está protagonizada por uno de los personajes más metepatas que te puedas encontrar en la literatura, Sam Pulsifer.
Metepatas y mentiroso, lo que al final complica mucho más su ya desafortunada historia, porque Sam, sí rehace su vida, pero no suelta prenda a su mujer sobre su pasado, la pobre ni sabe que incendió una casa, ni que accidentalmente mató a dos personas, ni que ha estado en la cárcel durante una década, ni que tiene unos suegros viviendo no demasiado lejos de Camelot (que es donde ellos viven). ¡Fantástico nombre eh?!

Todo le va relativamente bien hasta que aparece en su puerta el hijo del fallecido matrimonio que murió en el incendio de la casa de Emily Dickinson para arruinarle la vida, lo cual no le cuesta demasiado, gracias a esa gran red de mentiras que el muy cretino ha ido construyendo a lo largo de su vida. No le queda otra que volver a un hogar paterno que no ha visitado en diez años, un hogar que en nada se parece a lo que el recuerda, y al cual durante su estancia en la cárcel han ido llegando montones de cartas con peticiones para que queme las casas de otros escritores famosos.
Al poco, más casas museo de escritores comienzan a arder y ¡cómo no!, Sam que es el que tiene más experiencia en estos actos pirómanos también es el que tiene más papeletas para ser el principal sospechoso, así que no le queda otra que intentar encontrar a quien lo está haciendo, lo cual hará que espabile y madure, al menos un poco, para dejar de ser sólo un espectador de su propia vida y empezar a tomar decisiones. El problema es que cuanto más intenta reparar sus errores más parece alejarse de conseguirlo.

Jugaremos a investigar con Sam, en esta parodia de las novelas de detectives, conoceremos a personajes extraños, en algunos casos surrealistas y que por uno u otro motivo odian o adoran los libros, porque esta es una novela sobre la lectura y la escritura, sobre los amantes y detractores de libros. y que quizás sean de lo más interesante del libro (su madre, su padre, los analistas de bonos ...)

Saber que por cada casa museo que arde alguien tiene un motivo para querer que eso ocurra es cuando menos interesante. Cada uno tiene sus razones más o menos lógicas para pensar que su vida mejorará de alguna forma si esas casas arden.

Decir que el libro es divertido como pone en la contraportada, pues no sé, como mucho mantienes durante la lectura de sus hojas una sonrisilla pero poco más. Tiene momentos simpáticos, otros absurdos, pero toda esa "gracia" esconde mucha tristeza y también tiene una lacra y es que es sumamente repetitivo y a veces leeeennnntoooo.
Yo también opino como otros lectores que quizás hubiera funcionado mejor como relato corto o quizá con menos hojas.

De todas formas voy a decir que en general me ha gustado, pero la verdad es que me ha costado un poco leerlo de tan absurdas como me parecían algunas cosas. Tiene un interesante final , en el que Sam toma la primera decisión importante de su vida, pero claro no os puedo decir cual es. Se queda con un regular alto.

Si queréis leer las primeras 33 hojas de esta novela pinchar AQUÍ

4 comentarios:

  1. Lástima realmente la cosa prometía y andaba esperando tu valoración. Al menos uno que me quito de la lista de contemplaciones en la librería ^_^

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  2. Uys pues no lo pones muy fino al libro, pero en cuanto tenga un ratin le doy un vistazo a las primeras treinta y tres paginas y ya decido que hacer con el libro

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  3. La novela realmente no la había visto, pero se ve mas o menos. Y hay libros que no deberáin ser tan largos.

    Saludos. Nos leemos

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  4. El club de los pirómanos
    Lo tendré en cuenta y va a la voz de ya a mi libreta del plan infinito, tomando en cuenta que no es lo cómico que promete (leí una vez un libro que prometía grandes carcajadas y terminó no gustándome y a lo mejor no es malo, pero yo esperaba reirme mucho).
    Besos,
    Ale.

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